Cuando Willem llega a sus destinos suele hospedarse mediante Couchsurfing y, a cambio de un sitio donde poder dormir, el chico se presta a cocinar unos más que agradecidos pancakes...
Preparar blintzes y comerlos calientitos, con esa mezcla de sabores ácidos y dulces del relleno y la salsa puede ser la solución al antojo de media tarde.
Este curioso gadget fue una idea ganadora de un concurso organizado por la empresa Sharp y aunque es curioso, ¿podría revolucionar el mundo de la cocina?