Un sitio en el que las cucharas son reinas y el plato hondo rey, con una atención amable y desenfadada donde hay, además de pozole y tostadas, lo del día. La fórmula, de entrada, es invitadora. «José Guadalupe, Platos de Cuchara» está ubicado en el corazón del Mercado Roma en la ciudad de México y, en palabras de sus creadores, no son un restaurante pero operan como tal.

A María Guadalupe Zahie Téllez Neme y José Alejandro Zárate Vega, cómplices del mundo gastronómico desde hace años, se les invitó a participar en alguno de los locales del mercado y —después de mucho pensarlo y visitarlo— analizaron la oferta existente para llegar a la conclusión de que, como en cualquier mercado, las sopas, arroces y guisados son favoritos.

Ellos quisieron ir más allá y decidieron concentrarse en un solo tema, en este caso, los platos de cuchara. De un juego de los nombres de ambos dueños nace «José Guadalupe, Platos de Cuchara», un sitio con muy, muy buen pozole, tostadas y otros caldos.

El puesto tiene doce bancos y su oferta es muy directa: pozole, a diario, siempre de cerdo, bien elaborado con apenas el picante necesario y preparado con buenos ingredientes. Además un plato de cuchara a la semana, de acuerdo a la temporalidad, el clima o los productos a la mano, que puede ser mole de olla, caldo de frijol y hasta gazpacho en tiempos de calor.

El menú lo completan las tostadas, originalmente solo de pata o chicharrón prensado, pero ahora también hay de pollo y ante la creciente demanda vegetariana, de tinga de setas. No hay refrescos, más bien aguas frescas; la de limón con hierbabuena es la favorita. Te sirven en loza y vaso de vidrio, cosa que uno agradece y aplaude.

Además del obligatorio pozole, en este igar también hay tostadas de pata, chicharrón prensado, pollo y tinga de setas. // Foto: Animal Gourmet.

También hay cervezas y vino, y los asiduos suelen acompañar ya sea el plato de pozole, tamaño normal o tamaño “princesa” (para probar de todo y no matar el hambre), o el plato de cuchara del día, con una buena copa de vino. Mientras trabajas en la distinción de los intensos sabores de ese pozole puedes ver cómo las amables chicas que atienden cortan y pelan chiles, preparan tostadas y saludan a los clientes que, es claro, regresan.

Nos cuentan que cada vez trabajan con mejores proveedores y buscan que el maíz, por ejemplo, siempre sea de aquél pequeño comerciante del Mercado Juárez que lo vende desde hace más de 90 años. Lo mismo con la carne de cerdo comprada en el Canal de San Juan —antes de las 4:00 de la mañana desde luego— para encontrar las piezas que buscan y que dan sabor: el chicharrón prensado, el hueso de columna vertebral, la cabeza pequeña.

Los platos de cuchara de la semana derivan de los buenos productos que fueron encontrando y de las verduras de estación; por eso no hay reglas y mas bien se trata de lo que esté bueno, para que sepa bueno. El caldo de pozole habla bien de ellos, de cabeza, codillo, espadilla, hueso y además con caldos de otras proteínas, —res y pollo—. De verdad que el pozole crece.

De almuerzo, medio día o más bien hacia la nochecita, a «José Guadalupe, Platos de Cuchara» hay que ir, por su buen sabor, y porque los caldos animan el espíritu.

José Guadalupe, Platos de Cuchara

Querétaro #225, colonia Roma. (Local 19 del Mercado Roma)
Horario: lunes a domingo de 11:00 a 19:00 horas
Sitio web: www.platosdecuchara.mx
Twitter: @platosdecuchara
Facebook: /platosdecuchara