El queso ricotta es una delicia, y seguro hay un lugar en el infierno para quien se atreva a negarlo. Sin embargo existen pocas recetas que usan este gran lácteo en platillos salados.

Como queremos que te regocijes de este ingrediente, te compartimos cuatro formas distintas de disfrutarlo. Cuatro recetas sencillas que puedes preparar en santiamén.

Canelones exprés

Hervir los canelones
Rellenarlos de la mezcla de ricotta y cebollín. Enrollarlos
Colocar sobre refractario engrasado, cubrir de salsa de tomate bien sazonada (se vale también de frasco ya lista).
Espolvorear parmesano y hornear 20 minutos.

Botanita de calabaza y ricotta

Rebanar calabazas de ½ cm de grueso, salpimentar y asar en la parrilla hasta que queden cocidas pero firmes.
Con una cucharita, poner sobre la calabaza (como si fuera galleta o pan), un poco de ricotta mezclado con sal y piñones, nueces o pistaches picaditos.

Hot cakes de ricotta

Mezclar la harina convencional para hot cakes y añadir ½ taza de queso ricotta revolviendo muy bien. Si es necesario añadir un poco más de leche, adelante.
Hacer los hot cakes en una plancha y servir con mantequilla, mermeladas, mieles y ¡un poco más de queso ricotta!.

Wraps de verduras con queso ricotta

Mezclar chícharo japonés, ejotes y calabazas hervidos con aceite de oliva, sal, pimienta y ajonjolí. Añadir rábano y zanahoria finamente rebanados y crudos.
Abrir mitades de pan pita un poco calientitas en el comal, por la mitad, colocar unas buenas cucharadas de queso ricotta y después rellenar con las verduras de forma abundante. ¡El mejor wrap!