
Molletes con una buena porción de chilaquiles encima y una capa de queso gratinado encima… ¿qué puede salir mal cuando preparas unos tecolotes a tu gusto?

Como chilangos nos encanta meterle mano a todo lo que se pueda combinar; y es que no hay nada más placentero que la comida que deja satisfecho y de pasada apapacha el corazón. Los tecolotes son justo eso, una mezcla que combina lo mejor de dos mundos: los chilaquiles y los molletes.
No hace falta ser experto para darnos una idea de dónde viene tan suculento platillo; aunque siempre es buena opción comerlos en su restaurante de origen, -ese conocido por sus azulejos- nunca cae mal una receta casera para prepararlos al gusto.
Los tecolotes son una excelente opción para desayunar, comer, cenar o incluso botanear con unas cervecitas. Son la combinación perfecta para cumplir el antojo de chilaquiles y molletes. ¡Qué mejor que un 2×1!
Aunque parezca raro, son uno de los alimentos más completos a pesar de que no podemos negar que son un antojito gordo.
Por un lado están los molletes; el pan tiene carbohidratos y proteínas benéficos para nuestra salud, los frijoles son ricos en ácido fólico además de contener fibra y el queso tiene una gran cantidad de calcio.
Por otra parte, los chilaquiles tienen muchas propiedades; muchos de los ingredientes que se utilizan para preparar este platillo cuentan con un alto nivel de vitaminas.
Por ejemplo: El tomate verde tiene vitamina B3 y magnesio, el chile es uno de los alimentos altos en vitamina C y la cebolla vitaminas como la B,C,E además de fósforo y magnesio.
Todo pecado tiene su placer ¿o no?
Te dejamos una receta ganadora para que prepares tecolotes en casa.
Para los molletes
Para los chilaquiles verdes
Para las guarniciones
Tip Animal: Puedes colocar el queso antes o después de poner los chilaquiles, también puedes incluir jamón en lugar de tocino.