
Desde que se inventó, el refrigerador nos cambió la vida y permitió que pudiéramos conservar nuestros alimentos, aunque muchos de ellos no si quiera necesiten estar en esa caja mágica. Aquí tienes un listado de frutas que no deben estar en el refrigerador. Qué frutas no van en el refrigerador Hay muchas frutas y verduras … Read more
Desde que se inventó, el refrigerador nos cambió la vida y permitió que pudiéramos conservar nuestros alimentos, aunque muchos de ellos no si quiera necesiten estar en esa caja mágica. Aquí tienes un listado de frutas que no deben estar en el refrigerador.
Hay muchas frutas y verduras que, si las enfrías antes de tiempo, pierden toda su gracia. ¿La razón? Porque existen frutas climatéricas, que siguen madurando después de ser cortadas del árbol o la planta. Meterlas al refri frena ese proceso y, además, les cambia la textura, el sabor y hasta el color. ¿Resultado? Una fruta triste que a nadie le daría gusto comer.
El frío interrumpe de golpe el proceso de maduración del plátano, su sabor cambia y la textura se vuelve chiclosa. Lo mejor es dejarlos en el frutero para que desarrollen su dulzura natural. Si se te llegan a pasar y se ponen negros, no te preocupes, son los mejores para hacer pan de plátano.
Repite conmigo: todas las frutas de hueso van en el frutero, no en el refri, ya que alcanzan su punto perfecto de jugosidad y dulzura ahí. Si los enfrías antes de tiempo, se vuelven harinosos y sin sabor. Déjalos suavizarse bien en la cocina antes de usarlos o inclúyelos en un postre. Ojo, si por alguna razón picas las frutas, sí debes guardarlas en el refri, en un recipiente cerrado.
Elegir el aguacate perfecto ya es toda una hazaña, ¿no? Si los compraste duros, déjalos madurar a temperatura ambiente. Una vez suaves, disfrútalos directo del frutero. ¿Se te está pasando uno? Mételo al refri para ganar uno o dos días más.
Tip Animal: ponlo junto a un plátano para acelerar la maduración si tienes prisa.
Piña, mango, papaya, kiwi, todas estas frutas tropicales maduran mejor en el frutero. Ahí conservan su dulzura y jugosidad. Pero ojo: una vez que las partes, sí deben ir al refri, bien tapadas, porque hay algunas que fermentan muy rápido, como la piña.
Aunque no lo creas, los jitomates son frutas y el refri los arruina. La piel se les vuelve fea y la textura granulosa. Además, pierden su sabor fresco.
Ahora ya lo sabes: hay frutas que son felices al natural, sin frío. Dales chance de madurar en paz y te darán lo mejor de sí: sabor, dulzura y esa textura que da gusto morder.
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