
El pan de caja es de los más populares del mundo y no creerías todo lo que puedes hacer con él. Desde botanas hasta postres, te damos las mejores recetas.
No hay manera de negarlo, el pan de caja nos ha facilitado la vida al momento de preparar ese alimento rápido y sencillo que nos quita el hambre: el sándwich. Fue parte de nuestra infancia para el lunch escolar y ahora es momento de sacarle todo el provecho.
Antes de darte algunas recetas que son casi igual de fáciles y que también le sacan brillito al pan de caja va un poquito de su historia que simplemente merece aplausos.
Tal vez no te suene el nombre de Otto Frederick Rohwedder pero él se graduó como optometrista y después logró hacer patrimonio por medio de joyerías; entre uno de sus méritos es el inventor de la máquina que dio pie a todo, la rebanadora.
Casi terminando los año 20 del siglo pasado, Otto desarrolló este proyecto que por supuesto patentó para que no le robaran la idea. Consistía en una cortadora capaz de rebanar pan del mismo tamaño y con una velocidad impresionante.
Vendió su prototipo a un panadero que aumentó la no tan modesta cantidad de 2000% -¡dos mil por ciento!- sus ventas en dos semanas.
Esta máquina no solo era capaz de cortar, también envolvía y empaquetaba el pan de caja, así que se convirtió en la sensación; la moda llevó a Otto a posicionarla en el mercado e inspirar a otros a que desarrollaran otros prototipos con sus propias necesidades.
Actualmente hay muchas variedades para elegir tu pan de caja. Blanco, integral, de grano entero, sin orillas, artesanal y más, lo importante es que elijas el que más te gusta.
Una vez que tengas en tu casa el indicado es hora de preparar recetas ya sea dulces o saladas que no sean un sándwich, que por cierto, si es tu primera opción hay maneras de hacerlo mucho más delicioso.
Al ser recetas fáciles y rápidas, no está de más incluir a los más pequeños de la casa para que tengan un momento de entretenimiento y aprendizaje.
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